El Barcelona se coronó Supercampeón en una final que quedará marcada por una clara superioridad táctica, destrozando al Real Madrid en el partido disputado en Yeda. A pesar de que los primeros minutos del encuentro parecían prometer algo diferente, con un gol inicial de Kylian Mbappé, el Barcelona tomó el control del partido rápidamente y sometió a un Madrid que, por momentos, pareció no saber qué hacer para contrarrestar la ofensiva azulgrana.
El Gol De Mbappé, Un Espejismo Para El Madrid
Desde el inicio del partido, el Real Madrid parecía tener un plan claro para sorprender al Barcelona. Con un contragolpe rápido, Vinicius habilitó a Mbappé, quien no desperdició la oportunidad y anotó el 1-0 con un gol que demostró su capacidad para romper defensas a toda velocidad.
En ese momento, el Madrid parecía tener el control y se mantenía sólido, con Courtois evitando lo que pudo haber sido el primer gol del Barça en dos ocasiones, con sendas paradas a remates de Lamine Yamal y Raphinha. Sin embargo, el gol de Mbappé fue solo un espejismo para un Real Madrid que pronto vería cómo se desplomaba tácticamente.
El Barcelona reaccionó con determinación. El empate llegó rápidamente con una jugada que Lamine Yamal, el joven delantero de 17 años, convirtió en un golazo. Tras recibir un pase de Lewandowski, Yamal esquivó a Tchouaméni con gran destreza y colocó el balón suavemente junto al palo.
Este gol no solo igualó el marcador, sino que marcó el inicio de un vendaval azulgrana que arrasaría con el Madrid en el resto de la primera mitad.
La Goleada: El Barcelona Se Impone Con Claridad
El dominio del Barcelona fue absoluto. El equipo de Hansi flick, dirigido con inteligencia por Pedri, aprovechó las debilidades defensivas del Madrid, especialmente en su lado derecho. Las jugadas de Raphinha fueron devastadoras, y no tardó en llegar el segundo gol para los catalanes, con un penalti claro cometido por Camavinga sobre Gavi.
Lewandowski transformó la pena máxima con calma, y el Madrid comenzaba a ver cómo el Barcelona no solo se imponía en el marcador, sino también en el juego.
El tercer gol llegó poco después, en un pase largo de Koundé que Raphinha aprovechó para marcar de cabeza. En ese momento, la defensa del Madrid se veía totalmente desbordada, sin respuestas ante los ataques rápidos y precisos del Barça.
La vergüenza se multiplicó con el cuarto gol, cuando Balde, aprovechando un córner corto mal ejecutado por el Madrid, lideró un contragolpe con Raphinha y anotó el 4-1. El Madrid ya estaba noqueado, con una primera mitad para el olvido.
La Expulsión De Szczesny Que Se Convierte En Una Pequeña Esperanza Para El Madrid
En el segundo tiempo, el Madrid comenzó con una pequeña esperanza cuando Szczesny fue expulsado tras derribar a Mbappé, quien se dirigía directo al gol. La roja parecía ser la oportunidad para el Madrid de recortar distancias, pero incluso con un hombre más, el equipo de Ancelotti no encontró la forma de atacar con eficacia.
A pesar de un golazo de Rodrygo de tiro libre, el Barcelona no mostró signos de debilidad, y el Madrid no logró crear peligro real.
El Barcelona, con un hombre menos, se organizó de manera ejemplar, manteniendo el control del partido y defendiendo su ventaja con seguridad. A pesar de algunos intentos aislados de Mbappé, el equipo de Flick no pasó apuros y mantuvo su superioridad durante todo el segundo tiempo.
Todos los campeones en la historia de la #Supercopa de España 🏆🇪🇸
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— Betcris (@Betcris) January 13, 2025
Una Derrota Que Deja Muchas Preguntas Al Real Madrid
Esta derrota humillante deja muchas interrogantes sobre el futuro del Real Madrid. No solo fue una goleada dolorosa, sino que el equipo de Ancelotti mostró una falta de respuesta ante la presión y superioridad táctica del Barcelona.
La defensa del Madrid fue un coladero, y las carencias de Ancelotti para ajustar su equipo ante los embates del Barça fueron evidentes. Los blancos no lograron tener una respuesta ofensiva ante el juego del Barcelona, y ni siquiera con superioridad numérica en el segundo tiempo pudieron generar peligro real.
Por otro lado, el Barcelona celebró una victoria merecida, con un fútbol rápido, preciso y con una intensidad que ahogó al Madrid desde el primer minuto. La actuación de Raphinha, Lewandowski, y el joven Lamine Yamal, sumada a la dirección táctica de Hansi Flick, dejó claro quién era el mejor equipo en esta final.
La Supercopa dejó al Real Madrid tocado, con una derrota que no solo afecta su imagen, sino que también pone en duda algunas de las decisiones tácticas de Ancelotti. El Barcelona, por su parte, demuestra que está más sólido que nunca, con un estilo de juego que arrasó con las esperanzas de los madridistas.
Una goleada que, sin duda, será recordada por mucho tiempo, no solo por el marcador, sino por la forma en que el Barcelona se impuso sin piedad a su eterno rival.