La racha de 15 victorias consecutivas de los Cavaliers de Cleveland al comenzar la temporada llegó a su fin con una derrota por 120-117 ante los Celtics de Boston, un partido en el que los Cavaliers no lograron mantener su impulso, a pesar de un fuerte intento de remontar en los últimos minutos.
Esta derrota marcó un momento significativo en la historia de la NBA, ya que la racha invicta de Cleveland empató con la de los Rockets de Houston de 1993-94 y los Capitols de Washington de 1948-49 como la segunda racha invicta más larga al inicio de una temporada, pero quedó corta para obtener la posesión exclusiva de ese puesto.
Los Celtics Dominaron Desde el Inicio
Los Celtics de Boston mejoraron su récord a 12-3 con la victoria, y el partido se desarrolló con un dominio temprano de los Celtics. Establecieron una ventaja de 17 puntos al medio tiempo, una ventaja construida en gran parte gracias a una lluvia de triples, con Boston acertando 14 de sus primeros 22 intentos desde más allá del arco.
Para el tercer cuarto, la ventaja de los Celtics llegó a ser de hasta 21 puntos, impulsada por una destacada actuación de Jayson Tatum y sólidas contribuciones de varios jugadores. El tiro eficiente y la fuerte defensa de Boston parecían darle control absoluto del juego, pero los Cavaliers no se dieron por vencidos.
Cleveland montó una intensa remontada, impulsada por una racha de 18-3 en los últimos minutos del tercer cuarto. Aunque los Cavaliers lograron reducir la ventaja a solo dos puntos en cinco ocasiones diferentes, nunca lograron empatar el partido ni recuperar la delantera, con sus dificultades ofensivas impidiendo una remontada completa.
A pesar de lo cerrado del marcador al final, la superioridad en profundidad y rendimiento de los Celtics fue evidente durante gran parte del encuentro, ya que los titulares de Boston mantuvieron la ventaja, mientras que su banca era más vulnerable.
Esta derrota tuvo consecuencias más allá del registro de victorias y derrotas para los Cavaliers. No solo afectó su posición en la temporada regular, sino también su puesto en la Copa NBA.
Con los Celtics ahora controlando su grupo en la Copa NBA, los Cavaliers necesitarán una derrota de Boston o un desempate favorable contra otros equipos de la Conferencia Este para avanzar a la Etapa de Eliminación, lo que convierte esta derrota en un golpe crucial para las aspiraciones de Cleveland en la competición.
Factores Determinantes en la Derrota
Varios factores contribuyeron a que Cleveland no pudiera asegurar la victoria. Las dificultades de tiro de Darius Garland fueron un problema clave; terminó el partido con solo 3 aciertos de 21 intentos, lo que fue un lastre significativo para la ofensiva de los Cavaliers.
Además, la defensa de Cleveland en la primera mitad fue deficiente, lo que permitió que Boston construyera una ventaja considerable que los Cavaliers no pudieron superar. A pesar de varias oportunidades para capitalizar, Cleveland no pudo encontrar el ritmo necesario para darle vuelta al partido.
Desde una perspectiva del banco, las reservas de Boston no fueron particularmente efectivas. Payton Pritchard, Sam Hauser y Neemias Queta tuvieron diferenciales de puntos de -13 o peores, y esas alineaciones permitieron que los Cavaliers se acercaran al marcador.
Sin embargo, la rotación completa de Boston, que incluye a jugadores clave como Kristaps Porzingis, Jrue Holiday y Al Horford, probablemente no mostraría tales vulnerabilidades en juegos futuros de alta presión.
Cleveland aprovechó estos momentos más débiles de la banca, especialmente atacando a Queta, un jugador que es poco probable que figure en la rotación de playoffs de Boston.
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— Betcris (@Betcris) November 19, 2024
Reflexiones Finales
Desde un punto de vista estratégico, la ofensiva de Cleveland luchó para crear oportunidades efectivas contra la alineación titular de Boston. Incluso con sus jugadores clave, incluido el tirador Sam Merrill, Cleveland no pudo encontrar un éxito constante contra los esquemas defensivos de los Celtics.
Aunque los Cavaliers hicieron un buen trabajo al aprovechar las alineaciones de la banca de Boston durante ciertos tramos, depender de tales vulnerabilidades puede no ser sostenible en juegos cruciales, donde los jugadores clave de Boston verían más minutos.
Cleveland necesitará abordar sus ineficiencias ofensivas contra defensas de élite mientras se preparan para los playoffs, ya que el regreso de sus jugadores ausentes por sí solo puede no ser suficiente para resolver completamente estos problemas.